Título: El niño escarabajo
Autor/ Ilustrador: Lawrence David/ Delphine Durand
Editorial: Obelisco Ediciones Obelisco
Páginas: 32
Soporte: cartoné, 21,5 x 28 cm.
ISBN: 978-84-7720-794-8
Autor/ Ilustrador: Lawrence David/ Delphine Durand
Editorial: Obelisco Ediciones Obelisco
Páginas: 32
Soporte: cartoné, 21,5 x 28 cm.
ISBN: 978-84-7720-794-8
Edad recomendada: a partir de 8 años
Gregorio Sampson se
despierta un día por la mañana y descubre que se ha convertido en un bicho
gigante: en un escarabajo de color marrón rojizo, para ser exactos.
Lawrence David ha recuperado a Gregorio Sampson de “La
metamorfosis” para presentarnos su extraña transformación desde un punto de vista más optimista, aunque, con muchos
puntos en común con la obra de Kafka.
El humor, como no podía ser de otra manera, acompaña a
Gregorio en su peculiar día. Después de la primera sorpresa, no le queda más
remedio que vestirse (haciendo nuevas aberturas a su camisa) y bajar a
desayunar. La sorpresa en este caso es para el chico-escarabajo al descubrir
que su nuevo estado pasa desapercibido para su familia.
Si en la versión original la obra transcurre de manera
claustrofobia en las estancias del personaje, en este caso podemos disfrutar
de los diferentes escenarios con las ilustraciones frescas y divertidas de Delphine
Durand. Acompañamos a nuestro extraño
amigo en el autobús, en el aula, en el patio…mientras descubre cómo sacar
provecho a su nueva situación. No obstante, al volver a casa y descubrir que su
madre sigue sin reconocerle en su nuevo estado, la tristeza le vuelve a
inundar.
Debo reconocer que para mí fue una alegría descubrir que Obelisco
había editado este cuento-versión de una de mis obras favoritas. Todavía
recuerdo el impacto que fue para mí descubrir “La metamorfosis” y como me
cautivó el universo de hipocresía y soledad que lo envuelve. Creo recordar que
yo tenía unos catorce años y me encontraba en esa etapa de mi vida oscura pero
llena de preguntas existenciales. Esta nueva versión consigue dar a conocer la
obra a niños y plantear algunos de los temas de la obra original. Si en la
primera su entorno lo rechaza entre el asco y la indiferencia, en este caso el
personaje no es reconocido, no pueden ver su nuevo estatus de insecto. ¿Acaso
no es esta una de los mayores miedos de los niños, no ser mirado por sus seres
queridos? Pero Lawrence ofrece un respiro al personaje permitiendo que su mejor
amigo Miguel sí que pueda percibir su verdadera imagen. ¿Es que acaso lo conoce
más que los demás? ¿Puede que le vea tal como es porque está más cerca de su
realidad?
Si en la obra de McKee “Ahora no, Bernardo” los padres ni se
dan cuenta de que un monstruo se ha comido a su hijo y ahora ocupa su lugar, en
este caso el autor resuelve de manera más optimista. Nos recuerda que, aunque
la familia no siempre nos responde en el momento que esperamos, suelen estar
ahí cuando las cosas se vuelven realmente duras.
El pasado 29 de marzo, en la formación “Educación emocional
y literatura infantil” ofrecimos ejemplos de actividades a partir de algunos
cuentos, y este fue uno de los escogidos. Y es que, al igual que la obra original,
podemos hacer lecturas paralelas de esta peculiar aventura. La identidad, el reconocimiento, la
auto aceptación, la comunicación…varios fueron los aspectos emocionales que se
propusieron para trabajar a partir de esta historia. Por otro lado, una “transformación” física,
un cuerpo que ya no reconozco y que a priori rechazo, nos puede dar pie a
hablar de cómo nos podemos sentir como chicos recién entrados en la pubertad. Por
eso esta adaptación además de ser una historia divertida para compartir en el
aula, nos puede acompañar en tutorías y dinámicas de educación emocional.